Thursday, June 26, 2008

No me compares: Ay mi querido Zimapan!!!

La aventura nos llama, nos insita y el corazón palpita con cada aventura que la vida le presenta. No hay más opción que entregarnos al dulce y suave canto del desdén donde la armonía de nuestros paisajes se encuentra con el grato vaivén de la adrenalina. (marzo 2006)

Sunday, June 22, 2008

When solitude comes!

I'm so lonely,
God won't know me,
I can hardly get up.
I sold my halo,
Back in April,
Now, I can't hold my head up.
So, ring out the bell,
I'll fly where there's someone to tell,
My shoulders are colder since I Fell.
Someone save me,
Feel me breathing,
Someone get me home soon.
If I see sunrise,
And screw up my eyes,
I don't feel so lonesome.
So, ring out the bell,
I'll fly where there's someone to tell,
My Shoulders are colder since I fell.
I'm doing fine,
I'm getting by,
Tell me what I should do,
God knows why I'm watching the sky and it's so blue.
One fine morning,
Without a warning,
I'll go through the blue sky.
Until I do, I'll Wait for you,
So, I can get this right.
So, ring out the bell,
I'll fly where there's someone to tell,
My shoulders are colder since I fell.
So, ring out the bell,
I'll fly where there's someone to tell,
My shoulders are colder since I fell.

Thursday, June 19, 2008

Por las noches cuando rezo, pronuncio tu nombre,
Él sonríe recuerda su prolija creación, diáfana y singular
Yo no sé como te llamas, te nombro entre sueños, te quemo en mi lumbre,
es pobre, lívida por el eco que le sofoca… es tu nombre.

A mediodía cuando colmas, tu recuerdo es un texto colorido,
una hecatombe de anhelos y un suspiro encarecido.
Tu recuerdo inasible lo atrape entre las flores, estaba escondido.

Por las lluvias, tu mirada contiene un destello de estrellas empapadas
Tu mirada es la guarida de chispitas encantadas,
fugaces centellas que recorren el alma y se confunden por hadas.

Ante el frió de las sombras, en lo oscuro de tus ropas,
cerca de tu piel y tu silencio,
eres la risa de mi tarde nublada

Contrasta con el sopor que te tiene encadenada.

Eres rémora que espero a las diez

Eres mi todo y soy tu nada

Sunday, June 08, 2008

Pechos y Galletas

Pechos y galletas me tienes confundido;
pechos en el desayuno y galletas que has compartido
Suaves son tus pechos y ricas las galletas
gatos en tus pechos, azul en el hastío .

Por tus pechos no he dormido
Tus galletas son el recuerdo, tus pechos siguen escondidos
Pechos y galletas esto se ha esclarecido
son galletas pues lo que puedes ofrecer

¿Son tus pechos lo que puedo ver?,
o ¿las galletas han partido?
Pechos y galletas ¿lo has entendido?
A tus hijos las galletas, a tus nietos las galletas,
Y tus pechos habrán perecido

Friday, June 06, 2008

Caminata

Yo te encuentro en una risa, muy despacio y no aprisa.
Y tú me miras de ladito, un saludo muy quedito.
Y deshago el caminar, ¿si me alejo y ya no estás?

Pasa el día y te vas,
En la oscuridad apareces, mi alma se asombra
Nuevamente el cielo se resguarda y nos ilumina;
Y que la luna ma’ bonita es la que mire yo en ti,

Esta noche está muy fría, y la luna que se asoma
Y que estos días de mi vida, hoy son lunas, que se entibian
Y deliran cuando... estás tú aquí;
con tu alma serenita,
que no colma, que sonríe; ¡lo más!, dulce de las risas: Hoy te quiero en mi vivir.
Y que te quiero un poquito...

Un pequeño solecito, con sus rayos que te alumbran,
y alejan los más gris de mi existir.
Hoy te quiero tan cerquita, muy despacio, no aprisa.

Sunday, June 01, 2008

Dulcería y Canciones

¡Tú no puedes ser un retrato!, una historia tan fragante en pensamientos, atada en instantes serenos; un dulce ritmo en los azares, en las rutinas, la melódica alegría en conciertos de pesares.

Una tersa caricia y una mirada traviesa, parece que extiendes tus brazos a mi venida, yo me alegro, ingenuo, cotejo ese gesto de bienvenida. Te inmutas y apareces con esa inefable sonrisa, vuelvo a admirar tu franqueza.

¡yo no puedo hacerte poesía!, no es mi deseo profanar la larga cabellera en versos mal entintados. Eres prosa entallada, delicada y sutil. Yo puedo apreciarte en 7200 segundos, sólo mira... sólo miro el reflejo de tu alma, tan cristalino, puramente delicado; sólo un soplo basta para encantar el aire más cotidiano, ese instante, mil besos (no te tocan) y una hora, y me contagio de brillo...

¿Qué es guardar el silencio?, ¿es atarlo en los rincones?, ¿es ahuyentarlo en nuestras charlas?, es tan sencillo. Guarda un suspiro, mira vamos quédate un ratito conmigo y guardemos el silencio en lo lejano, en el estío. El silencio es inmune, ciertamente, y no soporta la cualidad de sustantivo, porque el silencio es tan necio y se aparta de mí cada que te veo y en ese momento yo puedo hablar sin el permiso de mis labios, soy tan propio y me he dado cuenta que el silencio entorpece, es como el aire en una hoja de hierro, es tan absurdo contigo, es tan amargo...

Pareciera que el silencio se entrelaza con los nervios del alma, toma posesión de ellos y el alma agobiada; entonces, no puedo tomarte en mis brazos y quedarme colmado de tu figura, por ello no puedo brincar en el instante que apareces, ni enjuagarte con las lagrimas que me provocas (son tan pesadas). Y quería invitarte a un festín de abrazos, comer un rato prendido de tus labios, saciar tu cariño, por lo menos compartir el desayuno contigo. Que más da si la amistad, nuestra amistad, solo puede fraguarse de a poquito.

Hoy te tiras en los andares, en un rió de melancolía a lo que llamo apartarse, sois tan fría.
¿Qué os pasa?, ¿Le duele el cariñito...? Trato de encontrarla en lo lejos de su mirada...
Sabes, hay vientos sosos y pesados, muy probable es que de lo lejos se entre mezclen y tropiecen, los vientos que respiramos, que nos soplan, se cargan de tristeza. ¡Pero niña no podemos vivir sin ellos!. Consecuentemente nos hierve la monotonía, se fatiga el alma del disgusto del viento y duramos así por varios días, meses, pero no creo que vidas. Al menos nunca he visto un huracán de agonía, yo creo que esos vientos vienen de la pobreza del hombre, de sus miserias se van ellos, y pérdidos recorren los pueblos y las ciudades; es ahí cuando se mezclan y hoy te tocó uno, seguro uno que se hizo remolino y no te deja, ¡bah! Préndele un cerillo. Y si no consigues alejarlo, te regalo un sorbito de mi aire encantado, que respiro de tus labios cada cuando no estás atrapada en los molinos de lasitud.